Carina, la madre de Marcela, denunció este miércoles, en una entrevista con El País, que se enteraron de la muerte de su hija por la llamada de una adolescente que estaba en el momento de los hechos y que ni allí, ni después, recibieron alguna comunicación oficial.
La mujer señaló que no la llamó nadie del Ministerio del Interior y que no se le ofreció asistencia psicológica. La mujer desempeña su tarea en el juzgado de Ciudad de la Costa, y sólo le dieron 10 días de licencia por duelo.
Según publica El País, desde el Ministerio del Interior se emitió un comunicado en el que se asegura que no pudieron comunicarse con la familia pero sí lo hicieron con la jueza del caso. La cartera agrega que el domingo al mediodía el Centro de Atención a las Víctimas de Delito fue informado por Jefatura de Policía de Canelones.
"Desde el Centro de Atención a las Víctimas de Delito no se pudo contactar directamente a los familiares, no obstante lo cual se mantuvo fluida comunicación con la jueza del caso, Vargas, quien tiene relación directa con la familia, poniendo a disposición nuestro equipo de psicólogos expertos en crisis y explicándole del acompañamiento que nuestro centro podría hacer en estos casos", agrega la misiva.
"Se le proporcionó un número telefónico para que la familia dispusiera el momento oportuno en que nuestro equipo se hiciera presente a brindarle asistencia. Desde el Centro de Atención a las Víctimas de Delito trabajamos en crisis, pero respetamos el dolor. El recurso está y estuvo disponible siempre", cierra la carta.