Según constató El Espectador, que tuvo acceso a documentos de la IMM, a la hora de su fallecimiento llevaba realizado su turno de seis horas, más 11 horas y media extra.
La situación no es aislada, fuentes municipales consultadas por esta emisora confirmaron esta realidad.
La copia de los ingresos y egresos de otros dos inspectores, elegidos al azar y publicados por El Espectador muestra turnos de 12, 14, 15 y hasta 20 horas de servicio de corrido.
En muchos de los casos se observa que los inspectores marcan su salida y un minuto más tarde su reingreso.
En noviembre el trabajador muerto había realizado varios turnos de más de 12 horas
Ante esta realidad la integrante de la Comisión de Seguridad Laboral de Adeom, Marina Acosta, declaró a ese medio que en función de esta información se convocará a la Comisión de Tránsito para discutir la situación.
Acosta responsabilizó directamente a las autoridades municipales por la sobre carga horaria que sufren los funcionarios.