Samir dijo que conocía al asesino porque el año pasado fue a Montevideo a rezar con la comunidad. En ese momento le dijo: "Maestro ,estoy ocupado, trabajo en la escuela y no tengo vacaciones para venir".
El jeque agregó que la acción del hombre "no obedece a un acto religioso" sino que fue "personal", por lo que, el homicida "no es un correcto musulmán".