Al suspender la sesión, el presidente del Senado, Renan Calheiros, afirmó que esta situación fue "única en 190 años" de vida parlamentaria en Brasil.
Calheiros calificó a los manifestantes como "26 personas asalariadas" con el objetivo de "obstruir" la votación impulsada por el Gobierno, con la que se pretende modificar la ley de presupuestos generales.
Los manifestantes protestaron contra la votación y se negaron a abandonar la sesión, aunque el presidente del Senado ordenó la evacuación del pleno de la Cámara de los Diputados.
En los momentos más tensos, la policía parlamentaria, los manifestantes y algunos diputados intercambiaron empujones en la galería superior.
El Gobierno pretende eliminar de la ley la meta de ahorro que se había marcado para este año, destinado al pago de los intereses de la deuda pública, para evitar incurrir en un delito, puesto que no va a poder cumplir los objetivos.
La meta de ahorro para este año era un superávit fiscal primario del 1,90 % del producto interno bruto, sin tener en cuenta el pago de los intereses de la deuda.
En los 12 meses cerrados en octubre, el superávit primario de Brasil ascendió a 28.600 millones de reales (11.440 millones de dólares aproximadamente), equivalente al 0,56 % del PIB.
Entre enero y octubre, el resultado es deficitario, antes del pago de los intereses, algo que no sucedía en el país desde 2002, cuando el Banco Central comenzó esta contabilidad.
El déficit fiscal primario acumulado hasta octubre se situó en 11.600 millones de reales (unos 4.640 millones de dólares), lo que ya hace imposible que se pueda lograr la meta de ahorro para el año.
La votación del Congreso se retomará mañana, según anunció Calheiros al suspender la sesión de hoy.
Fuente: EFE
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