En cuanto a la planificación del proyecto dijo: "En nuestra segunda oportunidad en la Selección, pudimos poner en práctica toda la idea que tuvimos dando vueltas en los años sabáticos, desde que terminamos de trabajar en Boca en 2003. Fue una tarea difícil por lo complejo que es dirigir en países con economías dependientes, ya que somos un continente que se dedica a exportar futbolistas".
"Sumado a las características que tiene Uruguay: por tener una baja población y, por lo tanto, tener poca cantidad de futbolistas, tenemos desventaja con las otras potencias del continente, como Brasil y como Argentina. En eso nos apoyamos para armar el proyecto, pensando el perfil de jugadores que queríamos, las exigencias, la relación con los futbolistas, el aspecto disciplinario y el fútbol, que siempre es lo más importante en el fútbol".
En referencia a los desafíos que se tienen por delante, Tabárez comentó: "Nosotros a la Copa América vamos a ir con un equipo en renovación y eso puede arrojar ciertas dudas y ciertas expectativas. La realidad del torneo nos marcará qué pasa. Nosotros no nos deprimimos cuando nos va mal y no nos ponemos eufóricos cuando las cosas van medianamente bien".
"El hecho de que vaya pasando el tiempo lo tomamos como algo que le pasa a cualquier selección. Vamos a ir a la Copa América como fuimos a la anterior: nadie hablaba de nosotros. Y en este momento no es una garantía hacia futuro, pero este país es el último campeón de la Copa América y, bueno, somos los defensores del título y eso nos da algo".
En referencia a cuál es uno de los equipos que más le gusta ver, Tabárez contestó: "Cuando me toca ver a Atlético de Madrid, me siento muy bien porque tenemos muchos puntos de contacto con respecto a la Selección de Uruguay y Simeone ya demostró que es un grandísimo entrenador. Se para de tú a tú para jugar contra el que sea".
Finalmente, al ser interrogado por cuánto le pesa seguir dirigiendo a la celeste, el maestro fue claro: "Había una película argentina, con Federico Luppi y con José Sacristán, que se llamaba Un lugar en el mundo. Uno ha caminado bastante por este mundo del fútbol y en esta segunda etapa como entrenador de la Selección hemos encontrado una razón de ser a todo lo que uno ha hecho como entrenador. Siempre compitiendo".
"Esto lo hemos comprobado en esta última Eliminatoria que hemos jugado. Hemos pasado malos momentos, pero siempre hemos tenido una capacidad de reacción. Hemos conseguido clasificaciones en un quinto lugar, por repechaje. Aquella vez, muchos creyeron que estaba todo perdido. Eso es lo que me ha hecho continuar. Lo difícil del desafío", cerró.