El futuro secretario de la Presidencia, Alejandro Sánchez, salió en defensa del futuro ministro del Interior, Carlos Negro, tras las críticas recibidas por sus declaraciones sobre el narcotráfico. Sánchez aseguró que la oposición ha sido "furibunda" y que no ha dado margen a la tradicional "luna de miel" con el gobierno electo.
Negro había afirmado que la "lucha" contra el narcotráfico "está perdida" y que el Estado debería buscar "tratar de controlar el mercado".
Estas declaraciones generaron críticas desde la actual administración y la oposición, con el ministro del Interior en funciones, Nicolás Martinelli, y el exministro Luis Alberto Heber, cuestionando su postura.
"Entrar a la cancha diciendo que el partido está perdido" fue la frase con la que Martinelli reprochó a Negro.
En respuesta, Sánchez sostuvo que se está malinterpretando al futuro ministro y reafirmó el compromiso del nuevo gobierno en la lucha contra la violencia y el crimen organizado.
"Hay que leer con exactitud y no quedarse con los titulares. Negro lo que ha dicho con meridiana claridad es que nosotros vamos a dar un combate frontal a la violencia, al crimen organizado y, por supuesto, al narcotráfico", explicó.
El futuro secretario de la Presidencia también marcó su descontento con la actitud de la oposición, afirmando que "parece que con el gobierno de Yamandú Orsi no hay luna de miel" y que las críticas han sido "bastante furibundas".
"Entiendo que la oposición está herida porque perdió el gobierno nacional, pero tiene que esperar que el gobierno electo llegue el 1° de marzo, asuma, comience a ejecutar políticas y, si cometemos errores, que nos critiquen. Pero ahora no hay espacio para el diálogo", advirtió.
Desindexación salarial
Sánchez, junto al futuro ministro de Trabajo, Juan Castillo, también se refirieron a la propuesta de desindexación salarial planteada por el próximo ministro de Economía, Gabriel Oddone, en el marco de una reunión con la Confederación de Sindicatos Industriales.
Oddone había defendido la posibilidad de aplicar la desindexación en ciertos sectores, planteando que el Ministerio de Economía buscaría explorar el tema en la próxima ronda de negociaciones salariales.
Sin embargo, la propuesta no fue bien recibida dentro del propio gobierno electo, el futuro ministro de Trabajo, Juan Castillo, dejó en claro su postura: "En principio no estamos de acuerdo con la desindexación".
Según Castillo, si bien cada integrante del gobierno puede tener opiniones distintas, el debate deberá darse dentro de la "orgánica" y no a través de los medios.
Sánchez también se desmarcó de la propuesta de Oddone, asegurando que el Ejecutivo priorizará la defensa del poder adquisitivo de los trabajadores.
"Oddone hizo un planteo personal. Yo no comparto la desindexación de salarios. La propuesta del Ejecutivo va a ser la defensa del poder de compra de los salarios, que es lo importante y relevante, más en un momento donde tenemos inflación baja", señaló.
El futuro secretario de la Presidencia argumentó que los aumentos salariales deben enfocarse en los sectores de menores ingresos, pero sin perjudicar a quienes ya tienen sueldos ajustados.
"No puedo decirle a una persona que gana $50.000 que, como mi prioridad es el que gana $25.000, va a perder salario. No puede perder salario. Porque con $50.000 también está difícil vivir", explicó.
También remarcó que las decisiones del gobierno se tomarán en conjunto y no a partir de declaraciones individuales.
"Todos pueden dar su opinión, pero después el Poder Ejecutivo resuelve cuando se junta el Consejo de Ministros", aclaró y comentó: "Nos vamos a expresar con las acciones, y las acciones van a ser las que planteamos", finalizó.