El Poder Ejecutivo propondrá al consorcio Aguas de Montevideo, responsable del proyecto Neptuno, suspender la ejecución de las obras durante 90 días. La intención es revisar a fondo los términos del contrato firmado durante el gobierno anterior, sin que se avance en nuevas etapas mientras se desarrolla esa revisión.
El planteo será realizado este viernes, en una reunión entre representantes del Gobierno y del consorcio.
Desde la firma del contrato comenzó a correr un cronograma con plazos de ejecución, por lo que la solicitud oficial busca frenar cualquier innovación durante el proceso de renegociación.
Entre los aspectos que se intentará detener figuran la compra de materiales y las expropiaciones de terrenos necesarias para levantar la planta potabilizadora en Arazatí, departamento de San José.
La suspensión permitiría analizar el alcance del proyecto y sus implicancias a mediano y largo plazo.
El ministro de Ambiente, Edgardo Ortuño, detalló la postura oficial a la salida de la primera reunión del grupo de trabajo creado para evaluar el proyecto Neptuno.
En diálogo con Telenoche, señaló que “hubo un análisis sobre el contrato” y que el viernes se transmitirán “los criterios” sobre los que se trabajó hasta el momento.
Según explicó Ortuño, el enfoque parte de dos premisas: “La prioridad de asegurar el abastecimiento de agua potable a la población” y “la decisión del Gobierno de rediscutir el contrato”.
La revisión pretende conciliar estas metas con una evaluación técnica y política del proyecto impulsado desde la anterior administración.
De acuerdo a lo informado por La Diaria, durante el encuentro OSE presentó un extenso informe con su visión sobre las obras prioritarias para garantizar el abastecimiento de agua potable en el área metropolitana.
Entre ellas, se destacó la necesidad de avanzar en la represa de Casupá, y Presidencia solicitó continuar con el llamado a licitación para ejecutar ese proyecto, en cumplimiento con un compromiso asumido durante la campaña electoral.