En una declaración conjunta, 14 países de la Organización de los Estados Americanos (OEA), incluido Uruguay, rechazaron la investidura presidencial de Nicolás Maduro llevada a cabo el pasado viernes. Según el documento, el acto "carece de legitimidad democrática" debido a la "falta de pruebas verificables de integridad electoral".
Los países firmantes expresaron su preocupación por "el continuo deterioro de la situación política, económica, social y humanitaria en Venezuela".
Además, instaron a la comunidad internacional a apoyar los esfuerzos diplomáticos, políticos y humanitarios destinados a abordar la crisis multidimensional que afecta al país sudamericano.
La declaración, emitida por las delegaciones de Argentina, Canadá, Chile, Costa Rica, Ecuador, El Salvador, Estados Unidos, Guatemala, Jamaica, Panamá, Paraguay, Perú, República Dominicana y Uruguay, cita principios de la Carta de la OEA y la Carta Democrática Interamericana.
Los países exigieron al "régimen dictatorial venezolano" restablecer el orden democrático y permitir una transición pacífica.
El documento también desconoció el triunfo otorgado a Maduro por el Consejo Nacional Electoral (CNE) y respaldó al opositor Edmundo González Urrutia, quien asegura haber ganado las elecciones del 28 de julio pasado.
Los firmantes exigieron respeto a los derechos humanos y el pleno ejercicio de los derechos civiles y políticos en Venezuela "sin represalias".
La declaración destacó las "persistentes violaciones de los derechos humanos" y expresó solidaridad con los venezolanos que se han visto obligados a abandonar su país.
Asimismo, reconocieron los esfuerzos de los países de acogida que han recibido a los migrantes y refugiados venezolanos.
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