Tras firmar acuerdo, Uruguay no entrará "en la lista negra de la OIT”

Las cámaras empresariales, el gobierno y el Pit-Cnt llegaron a un acuerdo evitando así que Uruguay ingrese a la lista negra de la Organización Internacional del Trabajo (OIT), según informó el ministro de Trabajo y Seguridad Social, Ernesto Murro.

Según se desprende de lo acordado, si bien los empresarios continuarán con la tramitación de la queja ante la OIT con el objetivo de modificar aspectos de la Ley de Negociación Colectiva, no denunciarán al país.

A su vez, Murro indicó que pedirá asistencia técnica a la OIT para continuar con las negociaciones, según informa Presidencia.

El presidente de la Cámara de Industrias (CIU), Washington Corallo, manifestó que es un "gesto de buena voluntad" porque se entiende que no es una buena señal que en una asamblea a la que el presidente uruguayo concurre invitado, esté presente este conflicto.

Corallo señaló que se acordó además, la visita de técnicos de la OIT a Uruguay para que analicen el tema y den una opinión técnica que tanto el gobierno, sindicato y cámaras "deberían aceptar".

Por su parte, el presidente del PIT-CNT, Fernando Pereira, destacó el papel de la negociación colectiva para resolver conflictos laborales, a la que definió como "muy positiva".

“Lo que hoy han planteado las cámaras empresariales, y a nosotros no nos ha parecido inoportuno, es que expertos de la propia OIT puedan acompañar este proceso de negociación; naturalmente que la negociación es uruguaya, pero (la OIT) puede ayudar a que esta negociación termine en un acuerdo tripartito”, dijo.

A todo esto, el presidente de la República, Tabaré Vázquez, viajará a Ginebra para dar el discurso central de la Asamblea Anual de la OIT, que se realizará entre el 30 de mayo y el 10 de junio.

Queja

La queja de las cámaras empresariales expresaba que "el gobierno se ha caracterizado por la convocatoria ligera e ineficaz para la conformación de algunos ámbitos de carácter tripartito, los que se han integrado por el sector empleador con la esperanza siempre frustrada de que se recogieran y respetaran sus aportes".

"Los Consejos de Salarios tal como están funcionando en Uruguay (...), han estado en franca violación de los convenios citados teniendo el gobierno un papel intervencionista y dirigista de la negociación colectiva, olvidando el gobierno que el Comité ha establecido que la sola o mera intervención de un representante de la autoridad pública en la redacción de los convenios colectivos, si no se limita a un papel de mera ayuda técnica, es inconciliable con el espíritu del artículo 4 del Convenio 98", indicaba.

Las gremiales empresariales cuestionaron la llamada "ultractividad" de un convenio colectivo: que una vez vencido, siga vigente hasta que se apruebe uno nuevo que lo sustituya.

"Al respecto debemos recordar que como lo ha dicho el Comité (de Libertad Sindical de la OIT), toda extensión de convenios colectivos debería realizarse previo análisis tripartito de las consecuencias que ella habrá de producir en el sector al cual se la extiende", expresaba el planteo de los empresarios.

El gobierno respondió a la queja manifestando que antes de los cambios adoptados en la normativa laboral después de 2005 "se podía despedir a un dirigente o militante sindical sin que el mismo tuviera acción de reinstalación (...) el propio Comité de Libertad Sindical se había referido a este tema".

"El sector empleador siempre ha sido escuchado. (...) No en vano, en materia de salarios, más del 80% de las actividades lograron convenios colectivos por unanimidad. Esta es una prueba incontrastable que no resiste posición en contra", indicaba el gobierno.