"La democracia representativa tiene sus patologías, sus enfermedades. Los procesos electorales imponen demagogia electoral, es inevitable y pasa en todo el mundo", dijo el mandatario.
En referencia los presos de Guantánamo el jefe de Estado dijo que durante la administración de Bush en EEUU se pagaban miles de dólares por cada "presunto talibán". "A plata conseguían prisioneros, y naturalmente le trajeron cualquier cosa. Hicieron un buen negocio a costilla de esta actitud de creer que las causas se compran. Y cayo gente que no tenía nada que ver, cerca de 200".
Para el presidente la "vergüenza" del Gobierno de Bush busca ser terminada por el presidente Barack Obama al cual "también le pasa que hay demagogia electoral y los republicanos le pusieron la plancha y lo tienen encerrado". Obama "quedó como presidente trancado, y desde ese punto de vista pidió ayuda a varios países".
"Nos hemos pasado una vida dándole palo a EEUU y le seguimos dando palo por su intervencionismo, por el abuso de fuerza. Pero una vez en la vida que un presidente trata de desarticular una barbarie dijimos que podía ser, siempre y cuando tengamos la seguridad de que no compromete la tranquilidad del país. Esta fue la condición", explicó.
"Me doy cuenta que en todas partes existen contradicciones de carácter político. ¡Ay de los ingenuos que no ven estas cosas!", sostuvo y expresó: "Hay quienes piensan que el tema de Guantánamo es un problema ajeno y que no se debería intervenir. Si pensás así, puede parecer que tenés razón, pero te hago esta pregunta: una vez que te enteraste que hay cerca de 200 tipos que se comieron un garrón y que están tirados, una vez que sabés eso, que están secuestrados; y vos pudiendo hacer algo no das una mano, ¿por tener cobardía? ¿no sentís, no te das cuenta que las campanas también doblan por ti?".
"Esta es una cuestión de principios, ¿Que no se puede ser tan alma podrida de no tener coraje para defender una causa?", reflexionó: "Quizá esto me toca de cerca por los años de cana que tengo. Tal vez hay otros que nunca la pasaron mal, que no tienen ni idea lo que son estas cosas".
Al mismo tiempo aclaró: "Curiosamente, cuando tomamos genéricamente esa decisión, sin que fuera condición, sin que nadie lo hablara, las gestiones que veníamos haciendo empezaron a prosperar y se abrió el mercado de los citrus".
"Ayer nos relajaban porque no hicimos acuerdos por el TLC, y nos relajan porque no salimos del Mercosur, y cuando logramos abrir rendijas, a astucia, trabajo, paciencia y colarnos en un mercado tan importante, nos amenazan. ¿Quién los entiende?", se preguntó.
"Hablan con nosotros solo cuando precisan el voto para un correligionario y nos mandan una carta o llaman por teléfono. Después no, no pueden hablar. En todos estos años nos saludaron una vez, nos trataron hasta de grasas", dijo Mujica.
"Siempre tuvimos un enorme respeto para el senador Larrañaga, pero lo fueron acorralando. Cuanto más lejos mejor, le dijo alguien de su partido. Lo fueron acorralando y hace mucho que no sabemos de él", disparó el presidente.
Universidad
En referencia a la Universidad de la Educación, el mandatario recordó que la idea tuvo los votos del Partido Colorado, pero no de los nacionalistas. "La sumatoria de lo que pudo arrimar el Frente más el sector que responde al Dr. Bordaberry no alcanzaba, se necesitaba algo más y no se pudieron conseguir unos pocos votos".
"El Partido Nacional se mantuvo a cal y canto, negando la posibilidad de fundar una Universidad dedicada a la formación de los docentes del país", agregó. "Prefirieron perjudicar en el mediano plazo al país, que aparecer como dándole un mérito a la iniciativa del Frente para fundar una nueva universidad".
Mujica recordó que durante el Gobierno del Partido Nacional en los años noventa "liquidaron los consejos de salarios y quisieron vender las empresas públicas y vaya batalla que costó. Todo eso estaba fuera del programa".
Conclusión
Al cierre de la extensa audición el mandatario reflexionó: "¿Esto es por la patria o es por el sillón? ¿esto es por la positiva? No, qué positiva ni positiva. Nunca dialogaron en todos estos años, hasta torcieron la cara para saludar, ¿y ahora me hablan de diálogo? Yo diría mentime que me gusta".
"Lo cierto es que estamos en coyuntura electoral y todo lo multiplican y lo hacen pamento. Pero la tranquilidad del país está primero. Nosotros no vamos a decidir nada hasta después de las elecciones. Y si quieren arriesgar todo lo que hemos logrado, que me lo digan, y yo lo tendré en cuenta, pero después", cerró.
Foto: Presidencia
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