Mujica: "Estamos haciendo un experimento de vanguardia en el mundo"

"El ser humano contrae usos que van contra su propia vida", dijo Mujica y agregó que esa característica es excepcional, dado que "el resto de los animales tienden a defender su vida, tratan de consumir lo mejor que pueden de acuerdo a las circunstancias que les toca vivir y solo por error coyuntural, alguna vez excepcional puede consumir algún veneno".

"No dudamos que el cigarro es un veneno ¿quién va a dudar? Es una amenaza contra la vida y hace rato que lo sabemos y lo padecemos y sin embargo fumamos y frecuentemente uno se encuentra hasta con médicos que fuma, nadie duda que la ingesta de alcohol en proporciones sistemáticas es mala, horrible para salud pero también es para la vida social ¿cuántas familias terminaron destruidas por el alcohol y sin embargo gastamos fortunas en alcohol", expresó el jefe de Estado.

Por otro lado el presidente comentó que el Gobierno maneja la información de que existen unas 100 mil personas que "esporádicamente consumen algún porro. He tenido el pecado y el vicio de fumar. Llegue tarde y nunca en mi vida probé un porro, tengo que rejuvenecer las neuronas y darme cuenta de cual es la vida de los muchachos. El consumo está a la vuelta de la esquina y a ha generado un mercado clandestino, es un monopolio de mafiosos", dijo.

Además Mujica manifestó que Uruguay "gasta fortunas en policías y medios técnicos en aparatos de intercepción" y que los jueces que trabajan en casos de narcotráfico utilizan coches blindados porque "están en la mira".

"La oferta de dinero y la amenaza sicaria están allí, se amenazan a las familias, si tu estás en el aparato represivo y no quieres colaborar te amenazan a la familia. Por un lado te ofrecen guita y por otro te ofrecen plomo. Hay que verlo como un negocio de mercado; a alto riesgo, altas ganancias", agregó.

"Hasta hace poco había valores, el narcotráfico tiene la característica de que termina arrasando con todo. La ley que se intenta es una regulación, no es un viva la pepa, regular algo que ya existe y que está en nuestras narices. Se intenta arrebatarle el mercado a la clandestinidad y tener un mercado a la luz del día, es una batalla por la salud pública, porque si el consumidor queda identificado podemos influir sobre él cuando se empieza a pasar de la raya", dijo.

La intención de este proyecto es que "la mayoría de la población entendiera la batalla para acompañarnos. La verdad es que la gravedad del problema es enorme pero este es un país de muchísima gente veterana y sana que tiene miedo lógicamente ante estas plagas. Somos un país de viejos, nos cuesta horriblemente atender y entender a los jóvenes, pero están allí, como no los entendemos los dejamos solos ante sus humanos errores, como no nos gusta el asunto miramos para otro lado. El Gobierno entiende que hay quedar la batalla allí, no dejarlos solos en la clandestinidad", sentenció.

"Que nadie sueñe que nosotros vamos a decir que la maruja es buena. Estamos concientes de que estamos haciendo un experimento de vanguardia en el mundo entero. Ya no estamos en el país de Jose Batlle Ordoñez. No estamos en el país de esa audacia, pero yo no voy a abandonar. Nadie piense que en la reglamentación de esta ley va a ser un viva la pepa y se va a fomentar el consumo por el contrario, yo no voy a abandonar, mientras sea presidente, aunque una parte importante del mi pueblo no me entienda, por que lo está en juego es el corazón de mucha gente que mañana va a conducir el país", concluyó.

Foto: Presidencia