Cuba vivirá un cambio histórico mientras se prepara para su relevo presidencial, donde sus ciudadanos mantienen una expectativa contenida luego de que, por primera vez, desde la Revolución de 1959, la isla tendrá un presidente que no llevará el apellido Castro. Escuche el informe.
https://www.dropbox.com/s/s5xisftyqs4bcdz/Fuerte_y_Claro_-180418-Entrevista_a_Informe_Cuba.mp3?dl=1
Si no se dan sorpresas, Miguel Díaz- Canel Bermúdez, será nombrado nuevo presidente del Consejo de Estados y de Ministros de Cuba.
En 2013, Raúl Castro anunciaba que su mandato culminaría en 2018 y que no iría por la reelección, y por ende, la atención se posó en Díaz-Canel Bermúdez, su mano derecha.
Durante seis décadas la isla ha vivido con la impronta de los Castro luego de que el mayor de ellos, Fidel, pusiera fin a la dictadura de Fulgencio Batista e instaurara su régimen.
En 2008, cuando Raúl Castro pasó al mando, su aperturismo generó sorpresas dando lugar al restablecimiento de las relaciones con Estados Unidos durante la era Obama así como el aumento de la actividad privada en un país donde las dos terceras partes de la población se desempeña en el sector público y gana en promedio, unos treinta dólares al mes.
Castro dejó sin efecto otras prohibiciones como la de salir al extranjero, tener un auto, una vivienda, o un celular y a pesar de que hablamos de un país que parece vivir suspendido en el tiempo, los ultimos años han traído consigo cambios, entre ellos, el entierro del Comandante Fidel en Santiago de Cuba.
Venezuela pasó a ocupar un papel que antes había ocupado la Unión Soviética aunque ese respaldo se vio debilitado tras la crísis que vive ese país latinoaméricano.
De todos modos, los pasos hacia adelante no han sido del todo firmes: la economía todavía aparece como muy centralizada, se redujo la mitad del petróleo venezolano, con la llegada de Donald Trump al poder, la restauración de las relaciones se ha visto congelada y los intentos por alentar la actividad privada se han enlentecido.
Será la Asamblea Nacional, el parlamento unicameral cubano, la que elija al nuevo presidente.
Todo parece indicar que Díaz-Canel será el hombre que sustituya a Raúl Castro, quien continuará como primer secretario del Partido Comunista, algo que le permitirá seguir involucrado en la vida política de Cuba.
Perfil
Ingeniero electrónico de profesión, Miguel Díaz-Canel, de 57 años, es un funcionario de carrera que no proviene del ejército ni pertenece a la llamada generación histórica de los guerrilleros de la Sierra Maestra.
Nacido el 20 de abril de 1960 en la provincia central de Villa Clara, pasó por todos los niveles de dirección tanto del Partido Comunista (PCC) como del Gobierno.
Fue designado por Raúl Castro como ministro de Educación Superior en 2009 y en 2013 vicepresidente primero, convirtiéndose en el político cubano nacido luego del triunfo de la Revolución con más alto rango en el Gobierno.
Su figura de vicepresidente se ha visto reforzada por su presencia internacional en tomas de posesión presidenciales, visitando Rusia o Venezuela (aliados politicos y económicos) o recibiendo a personalidades en La Habana.
Además, su segunda esposa, Lis Cuesta, lo ha acompañado a sus viajes al exterior, algo que los cubanos no estaban acostumbrados a ver ya que no existe oficialmente la figura de primera dama. Ya desde 2013, se lo veía como sucesor de Raúl Castro.
La expectativa sobre su gestión es que continúe por el camino que ha dejado Raúl, sin esperar grandes cambios.
“En la prensa se le ha presentado a veces como un aperturista. Es tan exagerado como aquellos que le acusan de ser de la línea dura. Creo que se dispone a mantener los elementos fundamentales del régimen político”, dice el profesor de la Universidad de Harvard, Jorge Domínguez, a EFE.
De todos modos, la elección de Díaz-Canel es más que una simple sucesión en el cargo de presidente: representa una transición generacional dentro de la Revolución cubana, entre otras cosas.
Informarte