El momento de mayor cercanía ocurrió cuando se encontraba sobre Nueva Zelanda a las 6:18 horas locales.
De 20 metros de longitud, apenas fue visible, aunque los aficionados de la astronomía se valieron de telescopios para visualizar el inusual fenómeno. El asteroide fue descubierto por un observatorio de EEUU, Arizona, hace tan solo una semana.
Aunque no impactó en la Tierra, su órbita lo traerá a su cercanía en el futuro, por lo que la NASA lo monitereará con atención.
Según informa el portal Infobae, ek asteroide se ubicará cerca de la banda de los satélites que orbitan alrededor del planeta.