En declaraciones al programa Fuerte y Claro, de Radio Informarte, el economista Daniel Olesker admitió que hubo errores en la ley de descentralización de ASSE, que derivaron en hechos donde los jerarcas se “apartaron de las normas, por razones de necesidad asistencial”. El extitular del MSP y el Mides también reflexionó sobre la gestión de la cartera de Desarrollo Social y la próxima ronda salarial. Escuche la entrevista.
Para el extitular de la cartera de Salud, ASSE logró convertirse en una “organización que se ha posicionado en el sistema con 500 mil personas Fonasa que la eligieron como prestador”.
El problema radica en el momento en que se creó la ley de descentralización de la administración estatal porque “sabíamos que no eran adecuada a una empresa pública de salud”, hizo el mea culpa.
“Nosotros hicimos una ley de descentralización muy formalota pero no hicimos cambios en el Tocaf, en la forma de rendir al Tribunal de Cuentas, algo que hubiera evitado problemas que son en relación a las normas vigentes pero que no significan corrupción en absoluto”, dijo y agregó: “Creo que hubo más apartamiento de las normas por razones de necesidad asistencial que porque alguien se llevara la plata para su casa”.
La otra dificultad observada por Olesker fue “la excesiva centralización que el Directorio practicó al momento de tomar decisiones y la poca capacidad que tuvo de generar una estructura regional o departamental que se moviera con su propio presupuesto”.
Estancado
En referencia a la gestión de la otra cartera de la que supo ser ministro, el Mides, Olesker comenzó haciendo referencia a la renuncia de casi 300 funcionarios en los últimos dos años.
Esto se debe, según el economista, a que Desarrollo Social es la dependencia que “paga más bajos salarios con respecto el resto de la administración y tenía una amplia cartera de personas contratadas por ONGs, se potenció la contratación presupuestada pero esa gente prefirió no presupuestarse”.
Sobre la conducción global de esa secretaría de Estado, Olesker opinó: “En este período, da la impresión que ha tenido un viraje hacia el Sistema de Cuidados y hacia las minorías” pero “las políticas más generales parecen estar un poco estancadas en su desarrollo”.
Conservadores
En cuanto a los lineamientos salariales presentados por el Poder Ejecutivo, a los efectos de iniciar la ronda de negociación salarial, Olesker declaró que fue una propuesta “conservadora”.
El espíritu de la propuesta, entiende el economista, es que “la situación es compleja y no se quiere perder más puestos de trabajo por tanto se crearon estos lineamientos que garantizan el empate, que el que tenga fuerza gane pero con plata de las empresas”.
“Es una falacia decir que se busca conservar el empleo. En todo caso si un sindicato, en su rama, tiene un problema y está dispuesto a sacrificar salarios para conservar empleos es una cosa, pero eso debe estar en el convenio firmado”, explicó.
“En los últimos 80 años del país hubo cinco momentos de crecimiento. De estos cinco períodos, en tres creció el salario real y cayó el desempleo y en dos no creció el salario y el desempleo se estancó e incluso creció”, sentenció.
Segunda generación
En materia tributaria, el economista del Instituto Cuesta Duarte, se manifestó a favor de pasar a una segunda generación de reformas.
“El problema del Uruguay es que tiene insuficiencia de capacidad tributaria, puede recaudar más pero no sobre el trabajo”, dijo y explicó que los informes elaborados por el Instituto que responde al Pit-Cnt “pueden ser tomados como insumos para la discusión de sobre la necesidad de una segunda generación de reformas”.
“De hecho en el programa 2015-2019 se dice que se va a evaluar incrementar las altas rentas y los altos stock de capital. Cinco años después, tenemos un incumplimiento muy importante del programa. El PBI para la educación va a llegar a 5,3%, el fonasamiento de ASSE terminará en un 82%, el sistema de cuidados debería estar en la mitad de lo que se fijó como objetivo”, cerró.
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