Los sectores dentro del FA que más presionaron para que se concretara la caída de Xavier fueron el MPP, la 711 y el PCU, los cuales ampararon su postura en la necesidad de que se respete la decisión del Plenario de marzo de 2012, en donde se definió la incompatibilidad de ejercer la titularidad del partido oficialista con otros cargos políticos (como por ejemplo senador).
La siguiente fue la carta mediante la cual Xavier puso a disposición su cargo al frente del FA: