Sin dudas, Wilmar Valdez es la figura en el centro del escándalo en la Asociación Uruguaya de Fúbtol (AUF). Tras varios días de indagatorias, la Fiscalía aún no encuentra elementos que puedan probar un accionar delictivo en el expresidente de la AUF.
Según señala El Observador, la fiscal del caso, Silvia Pérez aún no ubica a Valdez entre los indagados sino que se centra en comprobar si el dirigente fue extorsionado. El viernes declararon el candidato a presidente de la asociación, Arturo Del Campo y el empresario Walter Alcántara.
Recién el jueves, el Ministerio del Interior se refirió al tema cuando el subsecretario de esa cartera, Jorge Vázquez se puso a disposición de la Fiscalía luego de que en los audios se menciona una posible "mordida" de ese ministerio en la licitación de las cámaras de seguridad para el fúbtol. Pérez no piensa por ahora citar al jerarca de gobierno.
La Fiscalía sostiene que en ninguno de los audios surge algún delito cometido por Valdez y, en caso de ser ciertos, gran parte de ellos refieren a pedidos de coimas, delito que en el Código Penal uruguayo no existe entre privados.
Comprobar una estafa en el marco de la adjudicación de las obras para la iluminación del estadio de Defensor Sporting es la única forma que Valdez puede ser acusado de algún delito.
La justicia trabaja sobre la hipótesis de que el expresidente de la AUF fue extorsionado para renunciar a su cargo y que los audios se utilizaron con ese fin.
Audios
Radio Carve reveló otros dos audios de conversaciones entre el empresario Walter Alcántara y el expresidente de la AUF Wilmar Valdez, en los que estarían negociando la esponsorización de la selección por parte de un banco, según informa Montevideo Portal.
“Lo importante de esto es que llegue a través de una empresa intermediaria sino después no tenemos chance de cobrar”, señala el expresidente de la AUF mientras el empresario asentía.
En la conversación Valdez habla sobre la forma más adecuada de presentar una propuesta: “No la entregues vos, que vaya otra persona. Va a ir otra persona con un sobre cerrado y después hacemos una reunión privada”.
Esa conversación es la continuidad de otra difundida anteriormente donde Valdez acordaba con Alcántara un encuentro en su auto para definir en qué forma harían la propuesta a la AUF.
Días después de renunciar, Valdez reconoció que la presión de Álcantara fue clave en esa decisión.
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